Soy Esther, tengo 42 años y he enfrentado desafíos que han definido mi camino. A los 25 años tuve una operación de corazón abierto que marcó mi salud desde entonces. Perdí a mi primer y tercer hijo durante embarazos difíciles, y el segundo fue de alto riesgo. Esto deterioró aún más mi salud y me sumió en la depresión. Decidí retirarme del trabajo para dedicar mi energía restante a mi mayor tesoro: mi hijo, mi gran bendición..

Aprendí que no puedo dar lo que no tengo, así que decidí priorizarme y comenzar un proceso de autocuidado profundo. Fue un camino lleno de lágrimas y dolor, pero me reinventé y me transformé en la mujer fuerte que soy hoy. Ahora entiendo la importancia de quererme más y sabotearme menos. Quiero compartir mi experiencia para ayudar a otras mujeres a encontrar el equilibrio entre cuidarse a sí mismas y cuidar de sus familias.

Hoy, estoy orgullosa de haber alcanzado un estado de bienestar y empoderamiento. Mi objetivo es guiar a otras personas en su propio viaje hacia una vida más plena y saludable. Juntas, podemos escribir historias de fortaleza y superación.. .